Problemas con las tarjetas
Los problemas con las tarjetas de expansión son fáciles de diagnosticar, porque dejan
de prestar la funcionalidad que proporcionan; por ejemplo, si una tarjeta de red no funciona,
el equipo no se puede conectar a una red. El problema puede ser el driver de la
tarjeta que no esté actualizado, entonces antes de desecharla es importante asegurarse
de que la versión del driver es la correcta. También puede ser que el problema esté
en los contactos de la tarjeta, por lo que procederemos a limpiarlos, o en la ranura de
expansión; en ese caso, cambiaremos la tarjeta de ranura.
La tarjeta de vídeo
La mayoría de los problemas de la tarjeta de vídeo se detectan fácilmente porque son
visuales y se muestran en el monitor. Lo primero que haremos cuando el ordenador esté
encendido y la pantalla está en blanco y negro y no se vea la imagen será revisar las
conexiones: el monitor debe estar conectado a la fuente de alimentación, el cable de
alimentación del monitor debe estar conectado a la red eléctrica y el monitor debe estar
conectado al ordenador.
Si tras esta comprobación la imagen sigue sin verse, probaremos con otro monitor que
funcione; si el problema persiste, probablemente haya que cambiar la tarjeta de vídeo.
Antes comprobaremos si la tarjeta está instalada y ajustada correctamente.
También podemos probar la tarjeta de vídeo en otro equipo que funcione o en otra ranura
de la placa base. Si la pantalla se ve correctamente, el problema puede que esté
en la ranura de expansión o en la placa base del equipo inicial.
Si tanto la tarjeta de vídeo como el monitor funcionan correctamente durante el inicio
del sistema pero falla con una aplicación determinada, el problema puede estar en el
controlador de vídeo.
Los controladores antiguos suelen contener errores o pueden ser incompatibles con determinadas
aplicaciones. La incompatibilidad es el origen de muchos de los problemas
del vídeo. Hemos de conseguir la última versión del controlador de vídeo e instalarlo
correctamente en nuestro sistema.
La tarjeta de sonido
Las averías en las tarjetas de sonido son bastante raras; si detectamos un problema, lo habitual
es sustituirla por otra. Lo primero que haremos será una serie de comprobaciones:
Examinaremos que las conexiones de los altavoces, el micrófono y el joystick están en
el conector adecuado y que encajan correctamente.
Que el volumen en la tarjeta de sonido y los altavoces estén activos. Verificaremos
que los cables de los altavoces no estén rotos.
Los problemas más frecuentes que plantea la tarjeta de sonido suelen deberse a su
configuración (IRQ, direcciones de entrada/salida, etc.). Si existe un conflicto con otro
dispositivo, hemos de reasignar el dispositivo en conflicto o la tarjeta de sonido. La dificultad
más común es una IRQ.
También hemos de verificar que la última versión de software del controlador de la tarjeta
de sonido esté instalada en nuestro equipo; para ello, entraremos en la página web
del fabricante para descargar el controlador e instalarlo en el equipo.
Desde las páginas web de los fabricantes de sistemas operativos podemos encontrar
sugerencias para solucionar los problemas relacionados con el sonido. Por ejemplo la
web http://windows.microsoft.com/es-ES/windows-vista/Tips-for-fixing-common-soundproblems,
que muestra algunas soluciones para lograr que el sonido funcione.
La tarjeta de red
Cuando tenemos un ordenador conectado a una red local mediante una tarjeta de red
y de pronto el ordenador no puede trabajar en red, realizaremos las siguientes comprobaciones:
Que la tarjeta esté bien conectada y ajustada en la ranura de expansión en la placa
base.
Que el cable de red esté bien conectado a la tarjeta.
Que el cable funcione correctamente; podemos verificarlo mediante un comprobador
de cables.
Muchas tarjetas de red vienen con un software de diagnóstico, que al ejecutarlo
indicará si la tarjeta está bien o no. Si el programa de diagnóstico detecta que la
tarjeta de red está bien, examinaremos la IRQ y las direcciones de entrada/salida.
Puede que haya algún conflicto con otro dispositivo; para ello hemos de reasignar el
dispositivo en conflicto o la tarjeta de red.
Podemos utilizar el comando PING.
No hay comentarios