Problemas en el arranque: Errores de arranque
No se encuentra la unidad
Las causas de que, tras superar sin problemas
todos los test de encendido y la BIOS,
un PC no empiece a cargar el sistema operativo
pueden ser múltiples.
De entrada, puede deberse a que, simplemente,
no encuentre una unidad o archivos
desde los que arrancar (como veíamos
en uno de los mensajes de la BIOS).
Como apuntábamos, en estas
circunstancias, habrá que revisar el orden
de arranque desde el menú de la BIOS, comprobando que todas las unidades se
encuentran correctamente configuradas,
conexionadas y en funcionamiento. En este
punto, podrás encontrarte con varios escenarios,
que son más frecuentes de lo que
parece.
El más habitual es el que te
comentábamos antes con las unidades
removibles: si la BIOS busca en éstas
antes que en el disco duro, puede darse el
caso de que haya un error de arranque por
dejarte insertado un determinado disquete,
memoria Flash USB o CD/DVD en la unidad.
Otro suceso al que nosotros nos
hemos enfrentado en múltiples ocasiones,
sobre todo con equipos que tenían algún
tiempo, hace referencia al arranque desde
unidades serial ATA. Aquí, y a diferencia de
las clásicas unidades IDE, muchas placas
incluyen soporte para SATA mediante controladoras
ubicadas en chips ajenos al
chipset.
Esto supone que la BIOS
las trata como controladoras externas
de almacenamiento, como sucede con
las SCSI. Cada BIOS es un caso aparte;
pero, básicamente, podrás encontrarte
ante dos cuestiones: la primera, que puedas indicar en el orden de
arranque que se opte por recurrir a
controladoras externas (generalmente
denominadas como Add in cards); la
otra que, dentro del apartado de configuración
de las controladoras de disco,
se pueda ajustar el modo de funcionamiento de Serial ATA para que emule
a discos IDE.
En esta última opción, la controladora
SATA hace pasar sus unidades
como un disco IDE más del sistema.
Los equipos actuales apenas tienen problemas
para gestionar correctamente la
nueva interfaz durante el proceso de arranque,
no obstante, máquinas con uno, dos o
tres años, que implementaron Serial ATA en
sus comienzos, probablemente puedan darte
más quebraderos de cabeza.
Error de disco E/S
Otro problema, por suerte muy poco habitual,
es el que se produce cuando, a pesar
de pasar los mínimos test de la BIOS y su
correcta detección, se producen errores de
lectura o escritura sobre la superficie física del disco duro. Esto es más habitual en
portátiles, ya que puede producirse a causa
de caídas o golpes bruscos y repentinos
que hagan chocar los cabezales del disco
sobre la superficie del mismo.
En los incidentes
más graves, o en los que se haya
visto afectado el sector de arranque, no
podrás ni arrancar el ordenador. Ahora bien,
lo más habitual es que observes cómo el
equipo comienza a iniciarse, aunque tarde
mucho más tiempo del habitual hasta, por
lo general, quedarse parado en alguna de
las pantallas de arranque de Windows.
La razón de esto es que alguno de los sectores
o zonas que almacenan los ficheros
del SO se han visto afectadas, por lo que el
disco intenta y reintenta su lectura. En los
accidentes menos graves, tras un buen
número de reintentos quizá logres el objetivo,
que arranque la máquina, aunque lo
haga en mucho más tiempo del habitual.
La mejor forma de diagnosticar este
problema es fijarse en la luz de actividad del disco y, sobre todo, «pegando la oreja»
a la unidad (tanto si es un sobremesa
como un portátil).
Si oyes ruidos tipo clic-clic-
clic rítmicos que se repiten constantemente
es que el disco está intentando
localizar y leer alguna pista o sector dañado.
En estos casos, lo mejor es que
extraigas la unidad, salves toda la información
que sea factible conectándola a
otro PC y, por supuesto, la cambies lo
antes posible. Más que nada porque un
disco dañado, por lo general, se irá degradando
más y más a medida que intentes
usarlo, sobre todo si la cabeza lectora ha
sufrido algún desperfecto.
El SO sigue desaparecido
En el caso de que no se encuentre un sistema
operativo para arrancar, y una vez
comprobadas que las unidades de arranque
y orden de la BIOS son correctas, el
siguiente paso es revisar particiones y
sectores de arranque. Para ello, es completamente imprescindible
recurrir a herramientas externas como
podría ser la Consola de Recuperación,
sin salir de Microsoft, u opciones más avanzadas
basadas en FreeDOS y distribuciones
LiveCD de Linux.
Ficheros perdidos
Otra posibilidad es que el PC sí encuentre unidad,
partición y sector de arranque pero que,
por diversas razones, los ficheros precisos
para arrancar correctamente se encuentren
dañados o desaparecidos. Con Windows, uno de los mensajes más habituales
es Falta NTLR. Presione Ctrl+Alt+Supr para
reiniciar o el que hace referencia al fichero
boot.ini, ambos imprescindibles para el
arranque.
Para estos momentos, a diferencia
de lo que ocurría en el punto anterior, lo mejor
es recurrir a la Consola de Recuperación, desde
la que podrás restaurar ficheros dañados o
perdidos si no tienes miedo a enfrentarte a
una interfaz textual basada en comandos. Aun así, si no te atreves con la
Consola, la opción menos compleja y práctica
pasa por la reparación del sistema operativo
desde el CD de instalación. La información
sobre este proceso la tienes en el recuadro
Restaura Windows desde el CD.
No hay comentarios