Discos duros IV
Serial ATA o SATA
Serial ATA o SATA (acrónimo de “Serial Advanced Technology Attachment”) es una interfaz de transferencia
de datos en serie entre la placa base y algunos dispositivos de almacenamiento, como pueden
ser discos duros HDD, lectores y regrabadoras de CD/DVD/Blu-ray, unidades de estado sólido (SSD) u
otros dispositivos de altas prestaciones que están siendo todavía desarrollados.
La interfaz SATA trabaja con una arquitectura “punto a punto”.
Es decir, la conexión entre puerto y
dispositivo es directa lo que significa que cada dispositivo se conecta directamente a un controlador
SATA no como sucedía en los viejos PATA que las interfaces se segmentaban en maestras y esclavas. Por lo tanto, se conecta un único dispositivo por cable.
SATA proporciona mayores velocidades, mejor aprovechamiento cuando hay varias unidades, mayor longitud del cable de transmisión de datos y capacidad para conectar unidades al instante y poder insertar el dispositivo sin tener que apagar el ordenador. Por lo tanto se conecta un único dispositivo por cable. Por estas razones Serial ATA ha sustituido a la interfaz tradicional Parallel ATA o PATA.
Igualmente, el cable SATA es más manejable y pequeño que el cable de un dispositivo PATA y permite
además su conexión de manera muy sencilla.
Velocidad de transferencia de datos y versiones SATA
Se tiene que realizar una consideración inicial en cuanto a las unidades de medida de velocidad
de transferencia de datos, ya que algunas fuentes suelen especificar la velocidad de las diferentes
revisiones SATA en gigabits por segundo (a partir de ahora Gb/s) mientras que otras lo hacen en
megabytes por segundo (a partir de ahora MB/s). Es necesario explicar que son unidades distintas,
ya que un bit es un dígito del sistema de numeración binario (un cero o un uno) mientras que un
byte es una unidad de información utilizada como un múltiplo del bit que generalmente equivale
a 8 bits. Aunque el bit es la unidad mínima de información empleada en informática, normalmente
los usuarios están más acostumbrados a usar unidades de almacenamiento en bytes (por ejemplo
cuando se compran discos duros de 2 terabytes).
La interfaz SATA ha experimentado tres revisiones en las que se ha aumentado la velocidad máxima
de transmisión. Estas revisiones, dependiendo del fabricante consultado, se denominan SATA revisión
1.x, 2.x y 3.x comúnmente denominadas SATA I, II y III, aunque desde la organización The Serial
ATA International Organization (SATA-IO) recomiendan no utilizar estos términos. En la siguiente tabla
se muestran las velocidades máximas teóricas de las distintas revisiones SATA:
También es importante explicar que cuando se dice que la velocidad de una interfaz de tercera generación
SATA es de 6 Gb/s no se hace referencia a la velocidad de transmisión de datos útiles, sino a la frecuencia a la que trabaja el disco duro que comúnmente se mide en megahercios (Mhz) o
gigahercios (Ghz).
Además para comprender la razón por la que SATA no alcanza la velocidad de
transferencia teórica, hay que explicar que SATA
utiliza la codificación 8b10b para la transmisión
de bits en los buses de comunicaciones. Esta codificación
consiste en transformar cada cadena
de 8 bits útil en una cadena de 10 bits antes de
transmitirla por la línea o bus, lo que implica una
pérdida de rendimiento del 20% con respecto a la
velocidad de transmisión en bruto.
Como se observa en el anterior gráfico la primera
generación (SATA revisión 1.x) proporcionaba
transferencias de 150 MB/s, que ya superaban a
los dispositivos PATA más rápidos. Esta primera revisión
de SATA también fue conocida como “SATA
150 MB/s” o “Serial ATA-150”.
Todavía se pueden encontrar en el mercado dispositivos SATA de segunda
generación con transferencias de hasta 300 MB/s (también conocida como “Serial ATA-300”)
y dispositivos SATA de tercera generación que ofrecen tasas de transferencia de hasta 600 MB/s. [9]
Afortunadamente las unidades que soportan la velocidad de 3Gb/s son compatibles con un bus de
1,5 Gb/s. Aunque para llevar a cabo esta tarea, es posible tener que configurar un jumper en el disco
duro. Normalmente estos discos duros incluyen en la etiqueta una indicación de cómo configurar
dicho jumper.
No hay comentarios