Amplía tu PC
Seguro que has oído en
multitud de ocasiones
que uno de los grandes
problemas de la informática
es la obsolescencia. Un ordenador
comprado hace tan
sólo un año entra ya en esa
fase en la que los programas
de última generación no funcionan
en él, y los que lo hacen
ofrecen un rendimiento
más bien pobre.
¿Esto significa que debes
comprar un ordenador nuevo, como
mínimo, cada año?
Afortunadamente, no. Un ordenador
es un conjunto de
componentes electrónicos
independientes entre sí. Por
lo tanto, cada uno de éstos
puede ser sustituido por
otro más actual.
Aunque esta operación
también supone un gasto
económico, éste es bastante
más bajo que tener que
adquirir un equipo nuevo.
Además, si periódicamente
vas actualizando los componentes
de tu PC, disfrutarás
durante mucho tiempo
de un equipo que no se
te “quedará corto”.
No obstante, la actualización
no es siempre posible.
Cuanto más antiguo sea el
ordenador, más cambios serán
necesarios. Piensa que,
cada cierto tiempo, cambia
el modo de funcionamiento
interno de los ordenadores,
por lo que los componentes
también cambian.
Comprobar el sistema
Lo primero que debes hacer
es conocer en profundidad
los componentes de
tu PC, pues de esta manera
te resultará más fácil determinar
qué ampliaciones
puedes llevar a cabo. Este proceso te llevará
cierto tiempo, pero es recomendable
que lo sigas paso
a paso, puesto que de otra
manera no dispondrás de todos
los datos necesarios para
poder actualizar tu equipo
de una manera segura.
Éstos son los datos que
debes recopilar:
•Microprocesador:
Marca, familia a la que éste
pertenece (Pentium X,
Athlon, etcétera), velocidad
en megahercios y el
tipo de zócalo que le corresponde
(socket o slot,
y denominación específica
del mismo).
•Placa base: .
Marca y modelo, chipset,
tipo y versión de la BIOS,
si dispone de ranura AGP
y, en caso afirmativo, tipo
de la misma y número total
de conectores PCI, así
como averiguar cuántos
de éstos están libres.
•Memoria RAM: .
Total instalada, número de
módulos “pinchados”, tipo
de memoria (SDRAM,
DDR, RIMM, etc), velocidad
y número de zócalos
disponibles.
Antes de que te asustes,
debes saber que, siguiendo unos sencillos pasos y utilizando
un programa de
diagnóstico, obtener dichos
datos no te costará absolutamente
ningún esfuerzo.
Para este proceso vas a
emplear la aplicación Doctor
Hardware (www.dr-hardware.com), puesto
que dicho programa te
permitirá acceder a toda
la información que te
hemos indicado.
No hay comentarios