¿Cómo funcionan las redes inalámbricas?
LA FLEXIBILIDAD ES OTRA VENTAJA DE LAS
REDES SIN CABLES
En estas redes usamos las ondas electromagnéticas para enlazar,
mediante un concentrador, los dispositivos de una red, reemplazando
los cables de las redes LAN convencionales.
Dar conectividad y acceso a las redes cableadas son las funciones
principales de este tipo de redes. Podemos pensar que son una especie
de extensión de las redes cableadas pero que nos ofrecen la flexibilidad
y la movilidad de las comunicaciones inalámbricas. Al utilizar
frecuencias de uso libre, no necesitamos pedir autorización o permiso
para usar estas redes. Lo que sí debemos tener en cuenta es la
regularización del espectro de frecuencias que varía de país en país.
Una desventaja que se presenta, cuando usamos las frecuencias
de uso libre (estas son las de 2.4 Ghz y 5 Ghz), es que las
comunicaciones pueden sufrir interferencias y errores de transmisión. Al tener estos errores, los datos se reenvían una
y otra vez. Entonces, si en una transmisión la mitad de los datos no
llegan a destino a causa de estos errores, tendremos una reducción
a las dos terceras partes de la velocidad eficaz real. Esto dará como
resultado una variación en la velocidad máxima
especificada en teoría comparándola con la que
obtenemos en la realidad.
Teniendo largas distancias, la velocidad real
en las redes WiFi estará muy por debajo que la
especificada en las normas, dado que factores
como la potencia de transmisión, las distancias
o el área de cobertura, el tipo de modulación
empleada, el ambiente propenso a la interferencia,
entre otros, afectan directamente a esta velocidad.
Por ejemplo, muchas redes 802.11g (veremos
más adelante en este capítulo la familia de IEEE 802.11) en interiores
tienen un área de cobertura de hasta 200 metros. Si agregamos
potencia podemos extender esta distancia, pero dependerá de los
objetos o paredes que puedan interferir la señal.
El término SSID (Service Set Identifier, en español: identificador
del conjunto de servicio) puede parecernos familiar, ya que es
el mecanismo que utilizan los usuarios para identificarse en la red
al momento de conectarse.
Este debe ser el mismo para todos los
integrantes de una red inalámbrica específica. Todos los puntos
de acceso y usuarios del mismo ESS (Extended Service Set, en español:
conjunto de servicio extendido) deben configurarse con el mismo
identificador ( ESSID). Pensemos a este identificado, como el nombre
de la red inalámbrica a la que nos queremos conectar, todos los
usuarios conectados a esta tendrán idéntica etiqueta.
BANDA BASURA
La historia del WiFi inicia en 1985, cuando el gobierno de los Estados Unidos (junto con la Comisión Federal
para las Comunicaciones) decide que se pueden usar ciertas bandas del espectro sin tener una licencia. La
llamada banda basura de 2.4Ghz era una de estas bandas, que solo era utilizada para hornos microondas o
equipos similares que generaban ruido de radiofrecuencia.
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